Natilia
es el producto de olvidarse a Natalia y Atilio en el bolsillo del
pantalón y meterlo al lavarropas y que se haga un masacote de los
dos que ya no son ni uno ni otro sino, por la alquimia de la
maquinola moderna, un tercer y nuevo elemento. En consecuencia, ya
establecimos por el momento a los personajes principales que son Juan
y Pedro que son protagonista y antagonista no sé si respectivamente
o no. El asunto es que necesitaríamos un conflicto que se puede
ocasionar por una tercera persona, que no sabíamos si tenía que ser
la tía Victoria que tiene una relación incestuosa con Juan y que
empieza a tener una relación clandestina con Pedro o quizá el
conflicto tendría que venir con otra tercera persona que vendría a
ser la cuarta persona, que le podemos poner María. Y pensamos que no
tenemos que caer en la obviedad y el lugar común de que el conflicto
sea que los dos se enamoren de la misma, sino que la misma se va a
enamorar de los dos tipos.
Pero
después lo que nos pasó es que no sabíamos qué hacer con el
incesto y la tía Victoria y no sabíamos para qué sirve que haya un
protagonista y un antagonista. Lo que resolvimos enseguida es que el
conflicto de María sea el secundario y que el conflicto central de
la novela es que a Pedro no le gusta la cara de Juan. Y entonces
pensamos en un diálogo super elocuente, que es del día que se
encuentran Pedro y Juan. Pedro le dice “che, no me gusta la cara
que tenés”. Y Juan responde “bue”, así medio amenazante, o
bien, mejor, responde “bueno” porque juan es un tipo serio, más
tímido que amenazante, y en definitiva pusimos que responde “Y
bueno…” con un dejo de suspenso, porque tenemos que llenar más o
menos 100 páginas desarrollando ese conflicto, para que sea bien
novela y no nouvelle o cuento largo o nouvelle corta. Así que el
conflicto central quedaría de esta forma:
_che,
no me gusta tu cara
_y
bueno...
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